Marilyn Manson demandó a Evan Rachel Wood por difamación, angustia emocional y “suplantación de identidad en Internet”. Manson, cuyo nombre real es Brian Warner, argumenta que las acusaciones de violación y abuso sexual de ella (que él califica de “falsedad maliciosa”, aunque ahora se han hecho eco de ellas muchas otras mujeres) han “descarrilado” su “exitosa carrera musical, televisiva y cinematográfica”. Además, la demanda acusa a Wood de colaborar con su amiga Illma Gore para torpedear la reputación de Manson en una campaña que supuestamente incluyó el hackeo, hacerse pasar por agente del FBI y una interferencia que equivale a la manipulación de posibles testigos.

En una declaración a Deadline, el abogado de Manson, Howard King, dijo que su equipo había reunido “un abrumador conjunto de pruebas — incluyendo tanto documentos como declaraciones de testigos — que demuestran que las historias que Evan Rachel Wood y su co-conspiradora Illma Gore han estado falsificando y difundiendo son tanto vengativas como demostrablemente falsas”. King también dijo que había una diferencia entre Warner, su cliente, y Manson, el personaje teatral de Warner.

Si bien recordamos, las acusaciones de Wood son terribles. El año pasado, identificó a Manson como el violador sobre el que había testificado ante el Congreso estadounidense en 2018. Wood salió con Manson desde 2005, cuando ella tenía 18 años y él era casi dos décadas mayor que ella, hasta 2010, un periodo que incluyó un compromiso. Durante ese tiempo, Wood ha dicho que Manson le hizo grooming y “le lavó el cerebro y la manipuló hasta la sumisión.” También afirmó que la ató y la torturó físicamente, y que la sometía a abusos antisemitas y que utilizaba regularmente insultos racistas. En un nuevo documental, Phoenix Rising, y que se emitirá en HBO a finales de este me, Wood recordó un incidente en el que Manson “esencialmente la violó ante la cámara” mientras grababa un vídeo musical en 2007. Wood dice que acordaron simular sexo para una escena, pero explicó que cuando llegó el momento, Manson “empezó a penetrarme de verdad”. Añadió que le habían dado absenta antes del rodaje, lo que la dejó apenas consciente. Ahora cree que fue “coaccionada para un acto sexual comercial bajo falsos pretextos”.

Manson, por su parte, ha negado sistemáticamente las acusaciones de Wood, enmarcándolas primero como “horribles distorsiones de la realidad”. En una declaración en respuesta a Phoenix Rising, King describió la memoria de Wood como una “narración imaginativa”, insistiendo en que Manson “no tuvo sexo con Evan en ese set, y ella sabe que esa es la verdad”. Pero el relato inicial de Wood provocó que más de una docena de otras mujeres se presentaran con experiencias similares, y Manson se enfrenta ahora a múltiples demandas por agresión sexual, mientras que se está llevando a cabo una investigación criminal en Los Ángeles.

En su demanda, Manson acusa a Wood y a Gore de una “conspiración” que supuestamente consistió en entrar en sus computadoras y en sus cuentas de redes sociales; en crear “una cuenta de correo electrónico ficticia para fabricar supuestas pruebas de que Warner estaba enviando pornografía ilícita por correo electrónico”; en entregar “listas de control y guiones a las posibles acusadoras, con una lista de los supuestos actos específicos de abuso que debían alegar contra él”; y en hacer “declaraciones falsas a sabiendas” a esas acusadoras, que luego resurgieron en las demandas. También alega que ambas mujeres se hicieron pasar “por un agente real de la Oficina Federal de Investigación, falsificando y distribuyendo una carta ficticia del agente, para crear la falsa apariencia de que las supuestas ‘víctimas’ de Warner y sus familias estaban en peligro, y que había una investigación criminal federal de Warner en curso”. Como resultado, Manson alega que ha sufrido daños a su reputación por difamación, así como angustia emocional.

Share Twitter Facebook Whatsapp Copy link

Despues de leer, ¿qué te pareció?