Luego de esperar tres años desde el incómodo paso de The Strokes por Chile este año, la revancha de Julian Casablancas, frontman de la banda, tuvo su oportunidad el pasado sábado 14 de octubre el en Club Amanda, a donde llegó junto a su proyecto Julian Casablancas & The Voidz bajo la gira titulada Hollywood Bolívar Tour, y a la que asistimos gracias a PUMA en una noche llena de expectativas.

Para calentar los motores, las bandas Promiseland y los mexicanos de Rey Pila le dieron el vamos a lo que se transformaría para muchos en la noche de redención de Casablancas y el estigma de The Strokes, con un retraso de más de 20 minutos y canciones que rellenaron sin coherencia alguna la una de la otra.

La gente (a decir verdad, la poca gente) que llegó a Club Amanda estaban algo impacientes: la mayoría de los efervescentes adolescentes fanáticos de Casablancas invadieron la primera fila del recinto, preparados a saltar y liberar toda la mierda de la semana, pero ya se perdía un poco la paciencia. Al momento de la aparición del protagonista de la noche, lleno de gritos y de Instamoments, Julian hizo lo suyo, y su clásico estilo I dont give a fuck hipnotizó a la audiencia.

El setlist comenzó con Wink y We’re Where We Were, y una puesta en escena que prometía bastante; sin embargo, se fueron opacando poco por problemas en el sonido y la constante entrada y salida del escenario de Casablancas, algo que nadie entendió por qué lo hacía, pero todo eso no importó; la misión era disfrutar al máximo de canciones como Father Electricity, Nintendo Blood y M.utually A.ssured D.estruction, pertenecientes al disco del 2014, Tyranny.

Si bien el estatus de Julian lo eleva a ser uno de los artistas más influyentes de la década pasada y verlo era una oportunidad que no se podía desaprovechar, quedó claro que para la banda no fue una velada para recordar: estridentes guitarras, visuales que provocaban convulsiones y un agotado Julian dejaron a varios con un rostro y una expresión de WTF!

El tímido y psicodélico show presentó una desordenada atmósfera, presentando a un Julian poco empoderado en escenario al inicio (entre la constante distracción de salida y entrada al escenario), algo que sin embargo logró revertir más adelante del show gracias a su carisma. En varias ocasiones se sintió agradecido de volver a Chile pese a los problemas técnicos de sonido y la desordenada producción que terminaron por oscurecer una noche llena de expectativas.

Setlist:

1. Wink
2. We’re Where We Were
3. Father Electricity
4. M.utually A.ssumed D.estruction
5. Aliennation
6. Nintendo Blood
7. My Friend The Walls
8. Cool As A Ghoul
9. Business Dog
10. Lazy Boy
11. Where No Eagles Fly
12. Human Sadness

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