Este domingo, el músico y empresario Jay-Z (cuyo nombre verdadero es Sean Carter) fue acusado de haber violado a una menor de 13 años en el año 2000, junto a Sean “Diddy” Combs. La demandante, que se presenta anónimamente como “Jane Doe”, afirma que el incidente ocurrió tras ser llevada a una fiesta posterior a los MTV Video Music Awards. Esta nueva demanda civil federal amplía una acción legal presentada anteriormente en octubre, donde solo se mencionaba a Combs como acusado.

Según los documentos judiciales, la joven fue invitada a la fiesta por un conductor de limusina que trabajaba para Diddy. Al llegar al evento, se dice que firmó un acuerdo de confidencialidad sin recibir una copia del mismo. Durante la celebración, que estaba llena de celebridades y consumo de drogas, la menor supuestamente se sintió “desorientada” tras beber una bebida que le ofrecieron,  por lo que entró en una habitación para recostarse. Poco después, tanto Combs como Carter supuestamente entraron con una tercera celebridad femenina no identificada. “La demandante reconoció inmediatamente a las tres celebridades”, dice la demanda.

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Carter supuestamente sujetó a la demandante y la violó, antes de que Combs hiciera lo mismo, según la demanda, que decía que Jane Doe se defendió durante la supuesta agresión y logró escapar cuando Combs retrocedió sorprendido. En un comunicado del equipo jurídico de Combs se afirma que la demanda modificada es la última de una serie de “maniobras publicitarias desvergonzadas, diseñadas para obtener pagos de famosos que temen que se difundan mentiras sobre ellos, al igual que se han difundido mentiras sobre Combs”.

En respuesta a estas acusaciones, Jay-Z emitió un comunicado a través de su sello Roc Nation, en el que niega categóricamente las afirmaciones. “¡¡Estas acusaciones son tan atroces que le imploro que presente una denuncia penal, no civil!! Quienquiera que cometa semejante crimen contra un menor debería ser encerrado, ¿no estarían de acuerdo?”, dijo el rapero, cuyo nombre real es Shawn Carter. “Estas presuntas víctimas merecerían justicia real si ese fuera el caso”, agregó y calificó la demanda de intento de “chantaje por parte del abogado de la acusadora, Tony Buzbee, quien en los últimos meses ha presentado varias demandas contra Combs por abuso y violación.

Jay-Z también expresó su frustración ante el hecho de que las acusaciones pudieran llevarlo a buscar un acuerdo. “No señor, esto me hizo querer exponerlo como el fraude que es de manera muy pública. Así que no le daré ni un centavo”, afirmó. Las implicaciones legales para Jay-Z y Diddy son significativas, ya que ambos enfrentan serias acusaciones que podrían afectar sus carreras y reputaciones. Diddy ya está lidiando con innumerables denuncias por abuso sexual y tráfico sexual, lo que añade más presión sobre ambos artistas en este contexto.

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