Un joven chileno llamado Francisco denunció a través de las redes sociales este fin de semana el maltrato y discriminación que recibió como empleado de la cadena de retail y de supermercados Cencosud en Chile poco después de haber ingresado a trabajar allí, más específicamente en Spid, la división de mercados express. Pese a que le habían prometido que el lugar contaba con un buen ambiente de trabajo, lamentablemente esto no fue cierto para él, pues luego de ingresar y llenar su hoja de vida, incluyendo sus enfermedades base (entre las que se encuentra el VIH), notó que la información incluida en esta planilla nunca fue tan privada como lo esperaba.

“Nunca, jamás en mis otros trabajos tuve algún problema o discriminación por esto, es más, querían saber más del tema para informarse y no caer en la ignorancia ochentera que algunos aún viven con ella en Chile”, dijo Francisco en un hilo en el que explicó lo sucedido. “La cosa es que declaré tener esta enfermedad en esta hoja ‘privada’ de vida sin darle ninguna importancia alguna, ya que en caso de emergencia ellos puedan avisar de esto. La cosa es que a una de las encargadas le llamo la atención esto”.

Francisco explica que una compañera venezolana llamada Nelly Bautista se acercó a él a preguntarle sobre el VIH porque que no sabia mucho del tema y quería saber más para aprender. “Se acercó igual algo asustada a preguntarme todo y cómo se contagiaba, tuve que enseñarle que el virus se ‘transmite’ y no se contagia, entre otras cosas básicas para conocer del tema”. A los dos meses de estar trabajando en el lugar y de sentir cierto desprecio por parte del resto de los empleados, una compañera de trabajo le informa que una de las encargadas, una argentina llamada Leila Quiroga, se ha estado encargando de decirle a todos los empleados que lo eviten. “Contándole a todos mis compañeros que tuvieran cuidado conmigo ya que podía ‘contagiarlos’ de VIH por usar la loza e incluso el baño y que trataran de no juntarse mucho conmigo”.

Afectado por lo sucedido, pidió una reunión con el jefe de tienda, Alexis Alejandro Muñoz Arancibia, esperando que debido a la violación de su privacidad despidieran a Quiroga o se hiciera algo al respecto. “Alexis juntó a algunos encargados y otros compañeros de trabajo de los cuales jamás se me paso por la mente que ellos también sabrían, básicamente todos sabían lo que estaba pasando excepto yo. Todas estas persona le echaron la culpa a mi compañero que me contó pero yo jamás le conte a esta persona de mi condición de salud y además elle no tenia acceso a esos documentos privados donde estaba esta información, Alexis le creyó a esta encargada de que no había sido ella y la protegió, no hubo amonestación alguna ni nada por el estilo”. Al día siguiente lo cambian a otra tienda, y en una conversación con su ex suegra, Francisco le comenta lo sucedido. Su ex suegra va a reclamar al encargado lo sucedido y que se pueden tomar acciones legales, a lo que este responde que Francisco se la pasaba de fiesta con sus compañeros y que probablemente compartió con ellos su estado serológico en una salida, cosa que Francisco niega.

Al día siguiente, el encargado le pide otra reunión a Francisco, diciéndole que su ex suegra había ido “a gritar, pegar portazos a la tienda entre otras cosas, a mi me extrañó ya que ella es una persona de mucha educación y jamás haría algo de ese estilo. Lo enfrento y la conversación quedó en nada, al día siguiente soy despedido por Alexis porque según él yo no estaba trabajando como antes y no cumplía mi rol dentro de la empresa (cosa que es totalmente falsa ya que yo cumplía con mi rol)”. Agregó que mantiene una demanda actual con Cencosud y que espera que se pueda despedir a las personas involucradas en la divulgación de su estado serológico, un crimen en Chile. Francisco cerró su hilo diciendo que mañana 26 de marzo hará una protesta en las afueras del local donde ocurrieron los hechos.

Share Twitter Facebook Whatsapp Copy link

Despues de leer, ¿qué te pareció?